Del afán viene el cansancio

Los días que más me gustan son los del fin de semana, porque puedo descansar y estoy en casa con la familia. Lo que único que no me gusta es que cuando va llegando el domingo por la tarde y me siento afanada pensando en lo que debo hacer el lunes, que debo salir nuevamente y retomar las actividades laborales. En este tiempo de embarazo me ha pasado igual, me pongo ansiosa contando los meses que faltan para tener en los brazos a mi bebé. Cada jueves que cumplo semanas de embarazo digo: “ya estoy más cerca”, deseando que llegue el momento del parto. En definitiva, no disfruto todo este tiempo de embarazo anhelando que llegue pronto el día que tanto deseo, con frecuencia dejo de disfrutar el presente pensando en el mañana.

Meditando en esto, decidí en primer lugar darle gracias a Dios por todo, reafirmando lo que dice su Palabra en 1 de Tesalonicenses 5:18: “Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús” (RVR1960). Debo agradecer a Dios por el hoy, por todo lo que me ha permitido vivir, por el gozo de su salvación, por el descanso, por el trabajo, por el tiempo de la gestación, por TODO, no sólo por lo que me gusta o quiero; debe ser por TODO.

En segundo lugar, reflexioné, ¿en dónde estoy poniendo mi confianza respecto a los planes que tengo para el día siguiente? ¿En lo que puedo hacer o en el único que sabe lo que va a suceder? “Así que no afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su propio afán. Basta a cada día su propio mal” (Mt. 6:34 RVR1960). Este versículo es muy conocido y lo recitamos de memoria, pero ¿verdaderamente estamos viviendo conforme a lo que dice?

Lo que de veras importa es tener a Dios como prioridad, confiar en su amor y cuidado providencial, reconocer que Él es Dios y no nosotros. No nos podemos dejar controlar por las emociones ni mucho menos por los afanes de este mundo. Dios quiere que podamos depender de Él, nadie sabe lo que vendrá mañana, pero Dios sí lo sabe y sí lo controla todo, nada hay imposible para Dios, y en Él “no hay mudanza ni sombra de variación (Stg. 1:17 RVR1960). Él es digno de toda confianza, porque Él es fiel a su verdad, cumple todo lo que promete.

En palabras coloquiales diríamos que “del afán viene el cansancio”.  No nos afanemos por querer hacer todo de una vez, Dios no tiene prisa. Cada día debemos ir al dueño de todo, al Maestro que nos ayudará en cada circunstancia que se nos presente. Descansemos en su Palabra, “echando toda [nuestra] ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de [nosotros]” (1 Pe. 5:7 RVR1960). ¡Que esta sea nuestra espada en todo tiempo! Y que recordemos siempre lo que nos insta el Señor mediante el apóstol Pablo: “Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: ¡Regocijaos! Vuestra gentileza sea conocida de todos los hombres. El Señor está cerca. Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús” (Fil. 4:4-7 RVR1960)

Bibiana Alvear Navarro

Equipo Devocionales Diarios ICCCTG

26 comentarios en “Del afán viene el cansancio”

  1. Siempre me he puesto a meditar esa cita “basta a cada día su propio mal” creo que al afanarnos lo enfocamos en mal y el estar controlando nos produce bien

  2. Esta meditación ha llegado a mi corazón pisando fuerte. Bendita es la palabra de Dios. Tienes razón mi hermana, mañana no sabemos que pasará. Solo El Señor tiene el control.

    Gracias Bibi x compartir este mensaje.

  3. Frente a las misericordias de Dios que son nuevas cada día..los afanes menguan y nuestra espera en Él es fácil y llevadera.
    Gracias querida Bibi,
    Bendiciones

  4. Bibi dímelo a mí que no he cumplido una semana y ya estoy leyendo lo que corresponde a la otra de gestación como si así el tiempo va a pasar más rápido. Edificante reflexión

  5. Ana Mercedes Contreras

    Amen! Bendita palabra que nos hace reflexionar. Que disfrutemos cada día
    Confiando En nuestro Dios que tiene El control de nuestras vida
    Muy edificante ti reflexión Bibi

  6. Nellys+Marina+Rodríguez+Zuleta

    Poderosa palabra de Dios! Gracias, Padre por hacernos recordar lo que necesitamos…. Muchas gracias, Bibi por dejarte usar para traer bendición

Responder a Bibiana Alvear Cancelar respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *