El Corazón

“Es un órgano constituido por un musculo cardiaco que se contrae y dilata permanentemente, su función es bombear la sangre que irriga nutrientes, gases, moléculas, con acción biológica, desechos de excreción y células de defensa a todas las células del cuerpo” (Enciclopedia básica del conocimiento universal, Editorial Norma. P. 202).

El corazón late de 70 a 80 veces por minuto (aproximadamente 100.000 veces al día)[1], pero su movimiento es involuntario, ¡no hacemos nada para que funcione!, pero si éste deja de latir podemos morir o tener graves problemas de por vida en otros órganos por la falta del oxígeno que no llegó a tiempo al no ser irrigada la sangre.

 

La Biblia, en muchos pasajes habla del corazón, pero no se refieren precisamente al órgano, para los judíos el corazón mencionado en la Biblia se refiere la mente y los pensamientos, estos son el centro de la razón, la voluntad, todo el ser interior, la sabiduría, todo lo que dirige el habla, la vista y la conducta.

Así como físicamente nuestro corazón, nos permite estar vivos y que nuestros órganos se mantengan en funcionamiento, nuestra mente hace que nuestra alma se mantenga  activa, saludable o no.  El corazón físico requiere cuidados como una buena alimentación y el deporte para mantenerse saludable y ser el motor de nuestro cuerpo, a la vez nuestra mente requiere cuidados para estar sana ya que es el motor de nuestra voluntad, decisiones, motivaciones y sentimientos. Si nuestra mente no se alimenta de la Palabra de Dios, no estará saludable y será presa de cualquier pensamiento contrario a la Verdad que es Cristo, mermando nuestras fuerzas y desviándonos del propósito  de Dios para nosotros.

Dice la Biblia que el corazón es engañoso (Jr. 17:9), en la caída del hombre todo nuestro ser fue contaminado con el pecado “Porque del corazón salen los malos pensamientos, los homicidios, los adulterios, las fornicaciones, los hurtos, los falsos testimonios, las blasfemias.” (Mt. 15:19 RVR1960).

Nunca nuestro corazón dará buenos consejos como dicta el mundo, sino que es la Palabra de Dios la lámpara que muestra por dónde andar, de modo que nuestro corazón necesita ser llevado a Cristo para que lo cambie por uno nuevo y ser expuesto cada día a Su verdad para que esta le blinde.

¿Qué pensamientos nos estamos permitiendo?, recordemos que no todo lo que ronda por nuestra cabeza es cierto, y la manera de comprobarlo es mediante la confrontación del pensamiento con la Palabra de Dios. “Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad.” (Flp. 4:8  RVR1960)

¿En qué invertimos nuestros pensamientos? estos pueden mermar o no nuestra voluntad y fuerza para levantarnos cada día en esperanza. ¿Son pensamientos de temor, de muerte, de lujuria, de crítica?… Nuestros pensamientos deben pasar por el filtro establecido en Filipenses 4:8 para saber si están bien o no, si no pasa uno de los controles entonces no es un pensamiento real y no es algo que merezca nuestra meditación porque nos distraerá y hará perder el enfoque en lo verdadero y eterno.

Por eso, la sabia Palabra de Dios nos dice: “Sobre todas las cosas cuida tu corazón, porque este determina el rumbo de tu vida” (Pr. 4:23 NTV). Lo que pensamos determina lo que creemos, cómo actuamos, qué decidimos  y también a qué nos aferramos para vivir.

¿En qué piensas?

Laura Lozada Pedroza

Equipo Devocionales Diarios ICCCTG

12 comentarios en “El Corazón”

  1. Mi corazón oh examina hoy, mis pensamientos prueba oh Señor, ve si en mi perversidades hay, por sendas rectas llévame.

  2. Sea mi Dios quien cambie mi corazon… se el derminando cada accion de este corazon que solo quiere hacer conforme a su voluntad

    1. Amén que sea el señor cada uno de mis pensamientos… Es cierto ! El corazón es el motor !! Que bella palabra
      Que nuestros corazones puedan estar bien recargados de la dirección y santa palabra de Dios.. lampara es a mis pies tú palabra…
      Gracias Laura ! Bendiciones

  3. Carlos Osorio Berrio

    Nada más engañoso que el corazón, ¿quien lo conocerá?, solo el Señor y su palabra nos guiará y cuidadsr de nosostros mismos.
    Gracias Laura por esta reflexión!

  4. Una reflexión muy certera. Por algo la Biblia resalta Sobretoda cosa guardada, guardar el corazón.
    Que el Señor nos ayude a filtrar todo a la luz de su Palabra.

  5. Que sea la palabra de Dios dirigiendo nuestras vidas, para así poder tener pensamientos agradables y que nuestra vida sea digna de alabanzas a nuestro Dios. Gracias Laura.

  6. Amén que sea el señor discierna cada uno de mis pensamientos… Es cierto ! El corazón es el motor !! Que bella palabra
    Que nuestros corazones puedan estar bien recargados de la dirección y santa palabra de Dios.. lampara es a mis pies tú palabra…
    Gracias Laura ! Bendiciones

  7. Judith Benedetti

    por eso Dios en el nuevo nacimiento empieza a depurar nuestros corazones porque no tiene buena fama la palabra dice de el que es engañoso y perverso que desastre

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