El verdadero Éxito

En nuestra sociedad existe una equivocada definición de éxito, determinado por cuánto ganas, en qué estrato vives, qué cargo ocupas o cuántos títulos tienes. Pero ¿qué pasaría si te dijera que muchas de las personas que tienen los bolsillos llenos de dinero, a menudo sufren de ansiedad, depresión o tienen una familia destrozada? Están llenos de privilegios y comodidades pero están vacíos en cuánto al propósito que Dios tiene con ellos. Pasan sus vidas persiguiendo lo que resulta no ser lo más importante.

Todos nosotros corremos detrás de algo: alguna meta trazada o un proyecto familiar, objetivos en nuestro trabajo o sencillamente tratando de sobrevivir en este mundo que abruma. Mateo 6:25 dice: “Por eso les digo que no se preocupen por la vida diaria, si tendrán suficiente alimento y bebida, o suficiente ropa para vestirse. ¿Acaso no es la vida más que la comida y el cuerpo más que la ropa?” (NTV).

El afán y la ansiedad son enemigos muy comunes, hasta nos enfermamos de tanta preocupación, nos roba la paz pensar en las deudas, la angustiosa pregunta: ¿alcanzará el sueldo para el arriendo, el colegio de los niños y el mercado? Jesús ya nos advirtió acerca del peligro de buscar sin descanso lo que vestiremos o lo que comeremos. La biblia nos exhorta a no ser como los incrédulos persiguiendo estas cosas, porque El Señor sabe de antemano de qué cosas tenemos necesidad y estará complacido de suplirlas para nosotros (Mt. 6:32). Jesús nos deja una amorosa invitación que sigue vigente para nosotros en este inicio de año, y es buscar primeramente el reino de Dios más que cualquier otra cosa, y todo lo demás será añadido (Mt 6:33-34).

¿De qué nos vale llenar nuestros bolsillos con dinero o tener la nevera llena de comida, si perdemos a nuestra familia? ¿De qué vale alcanzar el estándar en este mundo, si no estamos cumpliendo el propósito y llamado de Dios? ¿De qué vale ganar esta vida y perdernos en el proceso? Tendremos un éxito equivocado y no estaremos viviendo en la plenitud del Señor.

Hay una historia fascinante en la Biblia que nos ayuda a comprender esto mejor. Cuando Pedro y Juan subían al templo se encontraron con un cojo que les pedía limosna en la Puerta la Hermosa. Ellos, llenos del poder de Dios, pudieron decirle: “No tengo oro ni plata, pero de lo que tengo te doy… ¡levántate y anda!” (Hch. 3:6 RVC). Al instante ocurrió un milagro, el cojo de nacimiento entró con ellos al templo brincando y alabando al Señor (Hch. 3:1-10). Pedro y Juan no tenían dinero, pero estaban llenos de algo más importante que hizo que ocurriera un milagro. Si nos esforzamos más en los afanes de esta vida, quizá tendremos oro y plata; pero los cojos no se levantarán ni bailarán.

En 2023 propongámonos ir en pos de lo que Dios quiere hacer en nosotros y a través de nosotros. Procuremos estar más llenos de Dios y su Palabra que de cualquier sabiduría humana para hablar a nuestros hijos justamente, para regar la semilla del evangelio. Que los afanes de esta vida no nos ganen en la carrera, sino que podamos estar confiados en el Señor, sabiendo que Él suple nuestras necesidades, sólo Él es nuestro proveedor.

MANUEL MARTELO VERBEL

Equipo Devocionales ICCCTG

7 comentarios en “El verdadero Éxito”

  1. Ana Mercedes Contreras

    Amen. Señor te pedimos q está palabra quedé guardada en nuestros corazones.y no seamos olvidadiso.
    Gracias Manuel buena reflexion

  2. Que palabra más eficaz y pertinente para este inicio de año. Ayúdanos Señor a vivir este año enfocados en ti y en perseguir tus propósitos

  3. Sonia+Marcela+Neira+meza

    Refrescante palabra. Señor que nuestras fuerzas y anhelos estén siempre en buscar primeramente tu reino.
    Gracias mane por compartir.

Responder a Sonia+Marcela+Neira+meza Cancelar respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *